El Acueducto de Querétaro no solo es uno de los monumentos más impresionantes de México, sino que también esconde una historia fascinante que pocos conocen. Con 74 majestuosos arcos que se elevan sobre la ciudad, este símbolo de Querétaro es un recordatorio de la grandeza arquitectónica y las pasiones que motivaron su construcción.
Una Hazaña de Ingeniería del Siglo XVIII
Construido entre 1726 y 1738, el Acueducto fue una obra monumental diseñada para llevar agua potable desde La Cañada hasta la ciudad de Santiago de Querétaro. En su época, fue considerado un logro de ingeniería sin igual, destacando por su longitud de 1,280 metros y arcos que alcanzan los 28.5 metros de altura.
El Acueducto de Querétaro no solo es un recordatorio de la historia colonial de México, sino que también es un lugar perfecto para explorar y admirar. Pasear por sus alrededores al atardecer es una experiencia que permite disfrutar de vistas espectaculares y tomar fotografías inolvidables.
La Historia de Amor que lo Inspiró
Detrás de esta majestuosa construcción se encuentra una leyenda que ha pasado de generación en generación. Se dice que el acaudalado marqués Juan Antonio de Urrutia y Arana quedó cautivado por la belleza de una monja capuchina del convento de San Francisco, conocida como Sor Marcela. La religiosa le contó al marqués sobre las dificultades que enfrentaba la comunidad debido a la falta de agua potable.
Motivado por su devoción y posiblemente por un amor platónico hacia Sor Marcela, el marqués financió la construcción del acueducto para llevar agua a la ciudad y aliviar las penurias de sus habitantes. Aunque nunca se confirmó un romance, la historia perdura como una muestra de amor altruista y de compromiso con la comunidad.
Curiosidades del Acueducto que Te Sorprenderán
- Materiales de Construcción: El acueducto fue construido con cantera rosa y mortero, materiales que le han permitido resistir el paso del tiempo y conservar su imponente belleza.
- Cifras Impactantes: Se necesitaron más de 20,000 bloques de cantera y un equipo de cientos de trabajadores para completar la obra
- La Función Original y Actual: Aunque en la actualidad ya no se usa para suministrar agua, el acueducto sigue siendo un símbolo de la identidad queretana y un ícono que fascina a locales y turistas.
Un Monumento que Cuenta Historias
El Acueducto de Querétaro es más que una estructura de piedra; es un puente entre el pasado y el presente, cargado de historias que van desde la perseverancia humana hasta leyendas románticas que siguen inspirando a quienes lo visitan.
No importa si eres un amante de la historia, un fotógrafo en busca de la toma perfecta, o simplemente alguien que disfruta de la belleza arquitectónica, el Acueducto de Querétaro tiene algo especial que ofrecerte. La próxima vez que estés en la ciudad, detente un momento a contemplarlo y deja que sus arcos te transporten a un tiempo en el que un gesto desinteresado cambió para siempre el paisaje y la vida de Querétaro.
